En su discurso de entrega del premio Formentor a Pascal Quignard , el editor Antoine Gallimard se refirió a la meditación ininterrumpida sobre la vida de su obra como la esencia de lo que la literatura encarna. La experiencia estremecedora de quien no sabe conduce al deseo de un lápiz para construir un relato. Los mundos que no existen emulsionan en el papel impreso de un libro, en la pluma que rasga una libreta o en el lenguaje con el que apenas alcanzamos a describir el mundo. Un relato es la evidencia de aquello que existe sólo en nuestra mente. ¿No son acaso las palabras periscopios, pinzas con las cuales sujetar el mundo, incluso para delimitarlo? ¿No es el lenguaje… Ver Más